Como en cualquier tipo de fábrica, de menor o mayor tamaño, es fundamental garantizar una calidad del producto a los consumidores, así como demostrar una buena responsabilidad de la organización. Cada vez más, estos rasgos son los que marcan la diferencia a la hora de elegir una empresa proveedora, por lo que no debemos pasarlos por desapercibidos.
Existen varios tipos de certificados, que otorga la Entidad Nacional de Acreditación (ENAC) con los que puede contar una fábrica de palets. Pero en esta entrada desarrollaremos los dos más básicos y de los que no se puede prescindir.
Certificado NIMF-15
Las siglas, significan Norma Internacional para Medidas Fitosanitarias Nº 15 de la FAO. Este certificado regula el embalaje de madera utilizado en el comercio internacional por la fábrica de palets. Describe las medidas fitosanitarias para reducir el riesgo de introducción y/o dispersión de plagas relacionadas con este tipo de embalaje usado por la fábrica de palets.
Principalmente el certificado se otorga al tratamiento de palets con calor para la eliminación de plagas en otros países. Es obligatorio para toda fábrica que exporte palets de madera.
La marca de este certificado en el embalaje de los palets debe ser idéntica a la original, incluyendo:
- El símbolo de la CIPF en inglés (IPPC)
- El código ISO del país exportador.
- El código de la cámara de tratamiento que es asignado por el SAG (000)
- El código del tratamiento fitosanitario que se aplica (YY) que pueden ser algunas de las siguientes abreviaturas:
HT : tratamiento térmico de 56ºC durante 30 minutos.
HT KD : tratamiento térmico de secado en horno.
MB : fumigación con bromuro de metilo.
Certificado PFEC
El objetivo de este certificado es asegurar que los bosques de todo el mudo sean gestionados de forma responsable y que su multitud de funciones estén protegidas para generaciones presentes y futuras.
Cuando una fábrica de palets tiene este certificado, garantiza la aplicación de unas normas comunes acordadas internacionalmente en la transformación de los productos forestales. Por lo que garantiza además una procedencia sostenible de la madera utilizada para los palets, evitando la tala ilegal de árboles.
Además, una fábrica que consigue este certificado está contribuyendo al mantenimiento de numerosos ecosistemas y a la diversidad biológica, se convierte en el sustento económico de las poblaciones rurales y contribuye a la creación de un papel social y cultural responsable.
